JAQUET DROZ CONCEDE LA ETERNIDAD A SU «LOVING BUTTERFLY»
Este autómata toma el vuelo de nuevo gracias a una edición limitada que pone de relieve una excepcional esfera mineral de madera petrificada que data de hace más de 150 millones de años: la Chinchilla Roja
El asombro deja paso a un silencio palpable, al mismo tiempo que la fascinación ilumina la mirada de los coleccionistas. Jaquet Droz es una de las pocas casas relojeras que crean autómatas. Tras el éxito de las versiones en ónice y meteorito, desvela hoy una nueva versión de su Loving Butterfly Automaton. Explorando su fibra naturalista, muy arraigada a su historia desde hace casi tres siglos, la Casa muestra su dominio relojero y su creatividad en un guardatiempo estrictamente limitado a 28 ejemplares
Este objeto de arte animado se inspira en el dibujo con el nombre de «Le papillon conduit par l’amour» (La mariposa guiada por el amor), que el autómata «El dibujante», creado por Henri-Louis Jaquet-Droz, esbozaba ya en 1774. Hoy en día, se ha transformado en un viaje en tres dimensiones mediante un milenario mineral. Este modelo ofrece, con un decorado de un bosque en oro, una esfera realizada en madera petrificada entre 140 y 180 millones de años atrás: la Chinchilla Roja, que recibe su nombre de la localidad australiana del mismo nombre situada en el extremo este de la isla.
Este mineral posee una historia única. Hace 150 millones de años, florecía en la Tierra la primera flor, los primeros pájaros rompían el cascarón y los dinosaurios eran los reyes y señores del planeta. Fue entonces cuando la Chinchilla Roja surgió. Se creó a partir de un depósito de cenizas volcánicas sobre coníferos que, después, fueron devorados por la lava. El resultado es un mineral extremadamente raro y denso. Se necesitan varias horas de trabajo manual para solamente alisar su superficie
Esta nueva versión exalta el ángel y la mariposa, metáfora clásica de los impulsos amorosos. El carro simboliza la victoria, mientras que la mariposa representa a Cupido. La mariposa, al igual que el carro, está formada por varias decenas de apliques fijos y móviles, tallados a mano por artesanos joyeros de Jaquet Droz. El conjunto se instala en un verdadero teatro natural, cuya decoración en oro surge literalmente de ambos lados de la esfera. Sus múltiples niveles le confieren una profundidad de campo inédita, donde la mirada puede deambular y perderse. Un realismo sorprendente cobra forma, rebosante de detalles que dan vida a esta resplandeciente decoración
Una hábil complicación relojera que da vida a una escena naturalista animada. La alas de la mariposa se mueven al compás. Situadas lo más cerca posible del cristal de zafiro, aportan la sensación de que la mariposa realmente va a salir de la escena para alzar el vuelo. Las ruedas del carro están también animadas. Sin embargo, algunos rayos son giratorios y otros están fijos: una ilusión óptica de Pierre Jaquet Droz utilizaba hace ya casi tres siglos.
El decorado en oro que les rodea está completamente hecho a mano. Los árboles, con un grosor de 0,2 mm, cuentan con finas nervaduras grabadas individualmente con herramientas diseñadas a medida para esta tarea. Cada árbol está trabajado individualmente sobre su propio decorado
Esta edición limitada de madera petrificada «Chinchilla Roja» juega con la armonía cromática. Conjuga los tonos otoñales de la piedra con la calidez del oro rosa 18 quilates. Cada pieza, única gracias al dibujo de su esfera mineral, muestra todo el savoir-faire de los Ateliers d’Art de Jaquet Droz, un arte que fascina desde 1738.
Última hora: una parte de las ventas del Loving Butterfly Automaton irá destinada a la reforestación
Conmovido por la deforestación mundial y, particularmente, por los incendios que han devastado Australia en los últimos meses, Jaquet Droz anuncia que una parte de las ventas del automáta Loving Butterfly Chinchilla Red irá destinada directamente al apoyo de asociaciones comprometidas con la reforestación y la preservación de las especies endémicas, como "Plant a Tree for Me" o "One Tree Planted". La pieza que presentamos hoy ha podido ver la luz gracias a la madera petrificada en Australia hace alrededor de 150 millones de años, y con ella Jaquet Droz consolida su voluntad de devolver a la Tierra lo que nos ofrece, mediante un enfoque responsable, ético y con afán de compartir, como el que representa el Loving Butterfly Automaton "Chinchilla Red", auténtica oda al amor.
“Some watches tell time. Some tell a story”
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