JAQUET DROZ INAUGURA SU PRIMERA BOUTIQUE EN XI’AN, EN CHINA

Jaquet Droz empieza un nuevo capítulo en su relación privilegiada con China. La inauguración de la boutique de Xi’an, el próximo 6 de julio, consolida una historia que la misma familia Jaquet-Droz comenzó a escribir hace 280 años.

Entre la casa de la Chaux-de-Fonds y la Edad Media existe una historia común de la que Henri-Louis Jaquet-Droz sentó las bases hace casi tres siglos. En aquel entonces, abrió en Londres su primer taller de relojes destinado a la clientela asiática. En 1783, Jaquet Droz fue la primera casa relojera en penetrar en el palacio imperial, suscitando la fascinación del emperador Qin Qianlong y sus cortesanos, gracias a la originalidad y la fastuosidad de sus creaciones. Se dice que allí los pájaros de Jaquet-Droz cantaban de día y de noche. Algunas de esas piezas históricas se conservan en el Museo de la Ciudad Prohibida. También se dice que el nombre de la marca en chino fue sugerido por el propio emperador, lo que revela el nivel de calidad de los relojes de la casa. Hoy en día, fiel a su legado, la casa ha logrado preservar y desarrollar esta relación excepcional.

La ciudad de Xi'an no ha sido elegida por casualidad. Al igual que Jaquet Droz, Xi’an tiene una historia excepcional que se remonta a más de 3100 años. Fue capital de China y entonces se llamaba Chang'an. La Xi'an actual es una de las diez ciudades más grandes de China, con una población de más de ocho millones de habitantes.

Con motivo de este nuevo acercamiento entre Jaquet Droz y China, Christian Lattmann (CEO de Jaquet Droz), David Lu (vicepresidente de Jaquet Droz en China) y Gary Lee (director asociado del departamento de Relojes y Joyas del SKP de Pekín) evocaron su pasado común. La excepcional boutique, ubicada en el prestigioso centro comercial SKP, cumple una doble misión: recordar ese legado común e imponerse en la modernidad del siglo XXI. La sexta boutique Jaquet Droz en China occidental da prioridad a los materiales contemporáneos. Posee grandes espacios que favorecen la circulación abierta, como si se tratase de una historia formada por capítulos que transcurren libremente. Los tonos cálidos dan forma a una lujosa atmósfera de elegancia intemporal.

Jaquet Droz expone allí las principales creaciones que reflejan los grandes temas de su obra: Automates, Ateliers d’Art y Grande Seconde. Desde la inauguración, los coleccionistas y amigos de la marca han tenido la oportunidad de descubrir las piezas exclusivas y algunas de las novedades más recientes: El Grande Seconde Skelet-One, el Grande Seconde Ceramic Clous de Paris e incluso el Lady 8 Petite.

Estas piezas, testigos de una historia que continúa, se presentan junto a una exposición excepcional llamada «Story of the Unique», que está prevista hasta el 14 de julio. Allí, los amantes de la Alta Relojería tienen la posibilidad de admirar algunas de las piezas que han protagonizado la historia de Jaquet Droz.

Un artista de la casa viajó especialmente para revelar algunos de los secretos de la realización de piezas únicas con pintura en miniatura. Gracias a esas animaciones, los coleccionistas y amigos de la casa tuvieron una visión integral de la relación privilegiada que une a China y Jaquet Droz desde hace 280 años.

“Some watches tell time, some tell a story”